Nuestra Historia

Como empezo Santuario del Valle

A fines de los años 90 Ingeniería e Inmobiliaria Manso de Velasco, S.A. inició una urbanización que contemplaba 280 hectáreas en tierras que antiguamente pertenecían al “Fundo La Dehesa”, propiedad de los Monjes Trapenses. El proyecto incluía: loteo, urbanización y el diseño de áreas verdes. La urbanización del Proyecto inmobiliario fue llevada a cabo por INLAC, Ingeniería y Construcción en 1997. El estudio topográfico por UCETOP, Empresa de Servicios y Asesorías Topográficas, y el diseño paisajístico fue desarrollado por una importante oficina en Estados Unidos llamada RHAA: Landscape Arquitecture and Planning.

Según cuentan los pioneros del Santuario, para llegar había que pasar un portón de campo a la altura de Pedro Lira Urquieta (calle que no existía) y a los antejardines de las casas llegaban vacas a pastar. Cuando Manso de Velasco empezó a vender los sitios, no estaba hecha aún la urbanización, es decir eran solo cerros y el personal de ventas los llevaba en camioneta a ver los sitios. Cada persona se paraba en una esquina del sitio y con ellos se hacía una idea del mismo. “Hacerse la idea era tremendamente difícil sin que hubiera calles, pero así fue como yo compre mi sitio”, nos comenta Paulina Ureta, una de las primeras presidentas de la Junta de Vecinos.

Juntamente con el diseño del loteo, áreas verdes y plazas, Landscape Arquitecture and Planning se preocupó de incluir además un área destinada a actividades deportivas (Club de Tenis), lo cual lo hacía ya desde entonces, uno de los pocos proyectos de esta índole en todo Santiago. Cuentan que, durante su desarrollo los arquitectos estaban tan encantados con la cantidad de pájaros que había en el sector, que por ello decidieron nombrar a las calles con sus nombres.

El loteo Santuario del Valle se fue vendiendo en diferentes etapas, cada etapa y sector con su correspondiente Régimen de Servidumbres y Reglamento General de Loteo, todo elaborado con altos estándares de construcción y urbanismo, y dichos reglamentos conforman parte de las escrituras originales de compraventa de los sitios con Manso de Velasco.

Desde su inicio, todas las Juntas de Vecinos se han preocupado de preservar la belleza de nuestro Santuario, cuidando su elaborado diseño original. Han tenido que resolver importantes desafíos, como por ejemplo, la intención de construir un mall en la esquina del Boulevard Jardín de los Pájaros Sur con los Trapenses; el intento de cambio de uso de suelo de las canchas de tenis para construir edificios de 5 pisos (hoy en día, el club de tenis mantiene una servidumbre con la cual su uso solamente puede ser destinado a fines deportivos), y el traspaso de la mayoría de las plazas y áreas verdes, así como su mantención, a la Municipalidad de Lo Barnechea. Y en todos estos años, las Juntas de Vecinos hemos incorporado la importancia de financiar la seguridad del Santuario de manera privada.

Actualmente, de los 453 sitios que existen en el Santuario, solamente 4 quedan baldíos. Todos los demás son ya las casas unifamiliares de carácter residencial habitacional que fueron un día imaginadas en el Loteo. Sólo nos queda, como dice el mismo Reglamento, que “Todos los propietarios velen por el buen uso del parque, así como de las plazas y demás áreas verdes del proyecto con el objeto de preservar la belleza escénica del sector y contribuyan a la conservación del medio ambiente”.